22.1.24

¿Tres historias, una historia o ninguna historia?

 

He leído estas últimas semanas un libro y medio de la trilogía de la Tierra fragmentada. Lo que, a tenor de lo que he leído, es como la mitad de un libro muy grueso que forma la trilogía en su conjunto, porque, sinceramente, el primer libro no me ha funcionado como obra independiente. Luego explicaré porqué.

Me recomendaron esta obra como ciencia ficción (la trilogía ganó tres años consecutivos los Hugo), compré el primer libro hace bastantes años y tras leer la primera escena me sentí estafado y lo abandoné. La clasificación del primer libro como ciencia ficción es simplemente incorrecta. No sé si de la trilogía completa, ya que no la he terminado ni creo que la termine nunca. La entrada de la wikipedia en español se debate entre calificar el primer libro de ciencia ficción o no  y usa expresiones tan absurdas como 'ciencia ficción fantástica'. La entrada de la wikipedia en inglés la llama science fantasy, que podría ser tanto fantaciencia como cienciasía (aunque esta obra concreta no se ajusta a ninguna de mis dos definiciones).

Por mucho que se quiera invocar la ley de Clark (el rollo ese de la tecnología indistinguible de la magia) con la que no estoy de acuerdo como ya dije en algún post anterior, si intento ver lo descrito en el libro como una tecnología remotísima (tendría que ser muy remoto ya que la idea misma de manipular la corteza de un planeta hasta el nivel de activar o desactivar volcanes tiene una escala tan brutal, que los niveles de energía involucrados son casi impensables y dejarían en ridículo al generador que muestra la película el Planeta prohibido), la cosa tampoco cuadra con la ciencia ya que se dice que 'extraen energía' del calor para transformarlo en energía mecánica (en cantidad absurda), lo que no solo tiene la dificultad de la escala sino que viola la segunda ley de la termodinámica al transforma energía de alta entropía en resultados ordenados de baja entropía (Para ver una novela de fantasía que intenta respecta la conservación de la energía y respetar la segunda ley de la termodinámica, es mejor leer 'El nombre del viento', que tampoco es ciencia ficción, pero al menos procura no ignorar la segunda ley).

Personalmente me parece que el primer libro es fantasía y aceptablemente buena. Toda la obra relata mediante lenguaje mineral y geológico. No hay elfos, ni enanos ni dragones, ni discurre en un entorno medieval, lo que es muy de agradecer.  Se muestra un escenario postapocalíptico en una fase muy posterior de la crisis inicial, lo que tampoco es nada frecuente y esa fase no es un rollo a lo Conan ni a lo Princesa de Venus, lo que también es de agradecer. La autora hace un gran esfuerzo en dibujarnos una especie de futuro de la humanidad y de nuestro planeta, después de que éste se haya vuelto tectónicamente inestable. Un escenario en el que los 'eventos de extinción', se producen de forma aleatoria y repetitiva (a la manera de 'El crisol del tiempo' una de mis novelas de ciencia ficción favoritas). 

El escenario de la supervivencia de la civilización y la especie en un escenario imposible, es fascinante. Otra novela que lo explora aceptablemente bien aunque peca muchísimo de optimista es Seveneves, la obra que he mencionado antes es más creíble y tiene la ventaja de que sus protagonistas no son humanos. El problema es que la autora se debate claramente entre abrazar la ciencia ficción de verdad y empezar a ofrecernos resultados lógicos pero inesperados de un escenario así, y la necesidad de mantenerse en una sociedad reconocible para los géneros que maneja (es decir la fantasía). Para mí no logra ninguna de las dos cosas. 

Echo de menos la religiosidad en un escenario tan cruel. No me creo que la humanidad no monte mil religiones organizadas para explicar el desastre en el que viven. Echo de menos (tras los miles de años de desastres que dicen haber vivido así) las transformaciones sociales radicales, los reservorios genéticos, los cultivos submarinos, las ciudades flotantes/sumergibles, el canibalismo aceptado de forma convencional, el avance hacia una sociedad de hormiguero en la que se ponga muy en duda (o se descarte totalmente) el valor de cada individuo particular y muchas otras cosas que se me antojan inevitables en el escenario que pinta la autora. 

También me extraña mucho que la autora (racializada ella misma), dedique tanto esfuerzo y texto a las diferencias entre las supuestas diversas razas que viven su mundo. Al tiempo, a pesar de que todo el rato está sugiriendo que sus personajes investidos de poder obtienen sus capacidades por ventajas genéticas, no acaba de decidirse a ir en dirección al rollo nazi de Dune con castas separadas y un programa de selección genética humana estandarizada y centralizada. 

Y, en general, hay muchos detalles que no me cuadran, tales como que dejen a dos poderosos mutantes orogenéticos campar a sus anchas sin que los acompañe en su viaje todo el tiempo algunos de los poderosos 'guardianes'.

En general me parece que se trata de una obra de fantasía bastante original a la que merece la pena echar un vistazo, pero que no está del todo pulida (sé que es duro decir eso de una obra que ganó tres Hugos seguidos), que, sorprendentemente, no tiene conflicto central (supongo que la trilogía completa sí, pero el libro y medio que he leído no, no sé a qué se enfrentan los personajes ni qué persiguen), pero lo peor es que la autora parece dudar todo el tiempo de la calidad de lo que está escribiendo, de la potencia de su escenario (como si no fuese dramático a niveles colosales) y se empeña en lanzar escenas demasiado forzadas y detalles (como unas ballenas que pasan por ahí y sin buscarlo ni beberlo acaban congeladas) destinado aparentemente a darle más 'dramatismo' a todo.

Dadle una oportunidad, creo que a mucha gente les ha gustado esta trilogía, y si os pasa como a mí y no conseguís creérosla, pues abandonadla como abandonaríais un resort turístico tras el aviso de sumani.

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